lunes, 3 de diciembre de 2012

Hay algo que quiere explotar, ¡Avísale a tu perra que calle sus palabras!


Soy como la ruleta rusa del amor. El día es la bala. El arma son mis pensamientos. Estoy atada a ser peligrosamente arriesgada en cuanto a relaciones. Estoy destinada a romperlo todo, para querer tenerlo. Otra vez.
Te gusta cuando bailamos al ritmo de cualquier canción haciendo pogo, te aburro cuando hablo lo que mi mente grita. En qué piensas, lo sé.  Me absorbe las fuerzas y soy un zombie con ganas de aniquilarme. Ya calla esa cabeza, sus palabras son tan absurdas. Estoy corriendo hacia ti, ¿y te vas?
Lo estoy tirando todo para tenerte, ¿cuánto esperas que crea en que volverás? Despertaré una mañana con la idea de huir, no es difícil… tomaré mis cosas y me iré. No quieras creer que lo que siento me irá a decir que no. No hay opciones menos realistas, no hay más palabras ni oraciones, no sigas rezando, no intentes hacerme cambiar lo que quiero hacer. No hay salida.
Quizás todo vuelva a su realidad. Yo seré la luchadora y tú el perdedor. Los días se acortan cuando fumas tanto, el humo va a explotar en tu mente. Hay ideas que no puedo concretar y las tengo, eso no quiere decir que escriba todo lo que estoy sintiendo. Hay más cosas oscuras dentro de mí, tú no intentas averiguar, yo no voy a hablar.
Hay salidas que se cierran cuando el agua no corre. Hay amores que mueren, cuando ninguno riega. No basta conmigo, no tengo el poder suficiente. Lo di todo, lo aposté. Lo admito, perdí la ronda.

Ahí está el arma, con su misil dentro, ¿esperarás mucho para disparar? Tengo ganas de reír, ¿qué hay si llené todos los casilleros con balas? Podrías morir. Deberías morir. ¡Ya calla a tu perra! Ella quiere mi número, mis salidas, mis zapatos. Quiere mi vida, pero no la tiene. Te quiere a ti, te tiene y eres mío. Soy la chica libre, pero tu perra está agobiándome. Calla a tu perra, no te ama.
No hay tiempo para excusas patéticas, cariño. No hay vida en la cual alguien no se queme, pero tú lo has hecho demasiadas veces en este tiempo. Estás muriendo por tocarla. No es mentira, estás pegado ella es asquerosamente idiota. ¿Serán su cabello o sus ojos?
Sabes que no tiene sentido seguir probando esta mierda, no hay pruebas de que comeremos más de lo que bebamos. No somos inocentes, pero te daré la culpa. Tú tienes las razones, ¡Véndelas! Tu perra sigue hablando y me sangran los oídos, ¡no puedo seguir escuchando su voz hablándome de ti! Tu querida mierda es la menos indicada, ella miente y se siente libre, ¿es como yo?

Lo veo, en tus ojos hay pánico. No entiendo tus lágrimas, ¿para qué sigues si te duele? Hay ciertas razones que prefieres esconder, no voy a ayudar. Son las dedicatorias, soy la dedicatoria más pequeña entre letras. Llegará la mañana de la cuál hablé. No tendrás derecho a reclamar, ¡quiero ser la señorita Fortuna! Cambiaré mi apellido y bailaré sexualmente con cualquier mujer.
El Rock and Roll es cosa de escándalo. Tú ¿eres escandaloso? Tu perra está tocando mi pierna con deseo, yo sonrío porque tú eres la víctima. Estás mirando mal, pero es lo que crees. Va a dolerte, lo aseguro. No hay marcha atrás. Es la locura con un toque de miedo, no voy a tocarla me da asco; es tan básica. El tren pasa y tú lloras porque Señorita Miseria se va, ¡Señorita Fortuna no te quiere!
Para ser más exacta, hay tierra en mis zapatos y no quiero pensar. No quiero perderlo, pero mi mente apresura. Voy corriendo y tú quedas atrás. Volteo y corro de espaldas para verte desaparecer en mi mundo. Allí estás haciendo chau con la mano, ¡vas a morir en los recuerdos de una jodida adolescente! Te adormeceré, las píldoras ayudan.
Dile adiós a lo que conoces, mi mente explotará. No quiero ser la heroína, soy el alcohol. Tú solo dime que no quieres irte, es la entrada segura, tu pasaporte. No quiero un super héroe, me defiendo sola. El pánico sigue allí, en tu mundo; te tengo ánimos de desaparecer, ¡No quiero tenerlo!

El triángulo más asqueroso, tu perra no me agrada. No saludaré cuando la luna caiga, aunque siempre está allí aunque no la veas. Es la presencia de ella, ¡atormenta la vida! Atormenta a quién toque, lastimosamente nos tocó. Es tan abrumante, no la quiero.  No quiero que el mundo se divida en dos, estás del otro lado. Tu perra va a salvarte, descuida. Llegará el super héroe, voy a matarlo. Voy a quemarlo.
No quiero más palabras, solo una canción de amor. No quiero más suspiros, ¡Quemé tu corazón! No vas a decirlo más porque no tienes palabras, no hay nada. No hay algo que quieres recordar.










Hay algo que quiere explotar, ¡avísale a tu perra que calle sus palabras! 

sábado, 1 de diciembre de 2012

El primer minuto de la miseria.

¿De qué vale? ¿De qué mierda sirve seguir creyendo en algo que está totalmente destruido, como si fuera poco, también distante? Somos un estúpido grupo de personas manejadas por más idiotas, ¿Qué diablos tiene sentido ahora? Nada.
Dame más, sé fuerte como un león. Causame miedo, amo el terror. Golpeame y llámame perra, soy tú puta. Soy la puta que todo el mundo quiere, porque soy libre. Libertad, dolor, miedo, peligro, ¡Qué cosa más encantadora, dulzura! Una mujer que piensa, un miedo para todos los hombres. Soy libre, soy autosuficiente, ¡soy yo! Un gusto, soy La Señorita Miseria, una versión algo modificada. Ahora uso faldas y canto en octavas.
El primer minuto de la miseria, jodido gusto de ser tan autodestructiva, me amo de tantas maneras.