lunes, 16 de febrero de 2015

¿Quién superaría tal perfección?

Escribo, borro. Puntos, comas. Y aquella sonrisa que he logrado hacer aparecer en mi rostro sin siquiera pensarlo, debo agradecerle a cierta persona tener tal capacidad para alegrar esta última parte tan oscura de mi vida sin aviso previo y hacerlo, por excelencia casi irreal, demasiado bien. 
He guardado tanto qué arriesgar. Sin embargo, hoy lo apostaría todo, sin recapacitar cómo perderlo. Francamente, jamás he estado tan dispuesta a perder por alguien. No me interesaría, no si puedo ver aquella sonrisa y esos ojos soñadores achinarse al sonreírme con tal frescura. 
Ha sido tan extraño, pero supo ser justo lo que necesito. Es exactamente lo que necesito, ¿y a quién debería interesarle? Si no hay nada que logre quitar esta bendita sonrisa de mí rostro, ni aquella ilusión de tu mirada. Ya lo es todo, ¿no? Conseguir el mismo cielo abrazador solo en un par de brazos. 
Ya nadie logra que sonría con tal sinceridad, solo tu voz dulce diciendo algunas palabras lindas, porque ha sido todo lo que pudo decirme. Nadie ocupa lugar en mis pensamientos, tal vez sea porque no podría pensar en alguien más sin compararlo contigo y... ¿quién superaría tal perfección? 

No hay comentarios:

Publicar un comentario